Metodología Bosquescuela

Ilustración de Joey Chu

La Metodología Bosquescuela: Un Enfoque Transformador en la Educación Infantil 🌳

¿Te imaginas una infancia donde los libros conviven con el aroma de la madera mojada, donde los cuadernos comparten espacio con ramas y hojas, y donde cada clase se siente como una pequeña aventura? 🌱📖

Así es la experiencia de Forest School o Bosquescuela, una metodología que invita a los niños a aprender desde la naturaleza, explorando el mundo a su propio ritmo y fortaleciendo sus habilidades desde un enfoque integral.

Nacida en Escandinavia en la década de 1950, esta filosofía educativa se ha expandido globalmente, reconociendo la conexión esencial entre los niños y la naturaleza para su desarrollo integral. Frente a un modelo educativo cada vez más digitalizado, confinado y acelerado, la Bosquescuela busca reequilibrar el aprendizaje a través de experiencias prácticas, emocionales y físicas en entornos al aire libre (MacEachren, 2013).

🌳Fundamentos de la Metodología

La Bosquescuela se basa en una pedagogía experiencial donde los niños aprenden a través del juego libre, la exploración y la resolución de problemas en espacios naturales. Este enfoque promueve un aprendizaje autónomo, adaptado al ritmo individual de cada niño. Según Roberts (2017), esta metodología permite que los pequeños desarrollen su confianza y resiliencia, enfrentándose a retos reales como construir un refugio, cruzar un arroyo o identificar plantas y animales.

El papel del educador en Bosquescuela es más de guía que de instructor, facilitando oportunidades para que los niños conecten con el entorno y entre ellos. Este modelo fomenta un aprendizaje activo, en contraste con la pasividad que muchas veces caracteriza a los entornos educativos tradicionales (Forest School Association, 2023).

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🌳Beneficios del Aprendizaje en la Naturaleza

Numerosos estudios han documentado los beneficios físicos, cognitivos, emocionales y sociales de esta metodología. Entre los más destacados, se encuentra el impacto positivo en el desarrollo motor grueso y fino. Las actividades como trepar árboles, recoger materiales naturales o construir estructuras fortalecen los músculos y mejoran la coordinación, siendo fundamentales para habilidades futuras como la escritura (Early Impact Learning, 2023).

Desde una perspectiva cognitiva, los entornos naturales ofrecen estímulos complejos y cambiantes que mejoran la atención y fomentan el pensamiento crítico. Investigaciones recientes sugieren que los niños expuestos a la naturaleza muestran mejores capacidades para resolver problemas y una mayor creatividad, elementos esenciales en su formación académica y personal (Wellcome Open Research, 2022).

Emocionalmente, la Bosquescuela actúa como un regulador natural del estrés. Estar al aire libre reduce los niveles de cortisol, la hormona del estrés, mientras que el contacto con el entorno fomenta un estado de calma y conexión emocional (Roberts, 2017). A nivel social, las actividades colaborativas, como la construcción de refugios o el cuidado de huertos, promueven habilidades de trabajo en equipo y fortalecen los vínculos entre compañeros (Moore, 2014).

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🌱Relación entre la Metodología Bosquescuela y los Enfoques de Reggio Emilia, Montessori y Waldorf

Aunque la metodología Bosquescuela es única en su énfasis en el aprendizaje al aire libre, comparte principios fundamentales con enfoques pedagógicos bien establecidos como Reggio Emilia, Montessori y Waldorf. Estos modelos educativos, aunque diferentes en sus prácticas, convergen en su compromiso con un aprendizaje centrado en el niño, la autonomía y la conexión con el entorno.

Bosquescuela y Reggio Emilia: La Naturaleza como Tercer Maestro

La filosofía de Reggio Emilia, desarrollada por Loris Malaguzzi, reconoce al ambiente como un "tercer maestro", un concepto que encuentra un eco natural en la metodología Bosquescuela. En ambos enfoques, el entorno juega un papel activo en el aprendizaje. En Bosquescuela, este "tercer maestro" es la naturaleza misma, que ofrece desafíos, recursos y estímulos dinámicos que fomentan la curiosidad y la creatividad (Strong-Wilson & Ellis, 2007).

Bosquescuela y Montessori: La Autonomía en un Entorno Preparado

La filosofía Montessori, creada por María Montessori, subraya la importancia de un entorno preparado que permita a los niños actuar de manera autónoma, explorar y aprender por sí mismos (Montessori, 1912/2023). En la Bosquescuela, el entorno preparado se encuentra al aire libre, donde la naturaleza ofrece recursos ilimitados para la experimentación y el aprendizaje práctico.

Bosquescuela y Waldorf: Conexión con la Naturaleza y el Ritmo Natural

El enfoque Waldorf, desarrollado por Rudolf Steiner, comparte con Bosquescuela una profunda conexión con la naturaleza y un enfoque holístico del desarrollo infantil. En ambos modelos, se respeta el ritmo natural del niño y se valora el aprendizaje a través del juego, las actividades manuales y las experiencias sensoriales (Nicol & Taplin, 2017).

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🔍Mi opinión personal

En 2021, como parte de mi TFG en Educación Infantil, me propusieron crear un proyecto educativo que atendiera las necesidades que detectase en el centro en el que estaba realizando mis prácticas. Era una pequeña Escuela Infantil en un pueblo de Pontevedra, con un patio reducido entre edificios, tres aulas y una sala común sin ventanas. Me conmovía mucho la situación, ya que justo enfrente había un parque amplio y lleno de árboles, un espacio natural que podría haber sido aprovechado por los niños.

Desde mi experiencia laboral y personal, sabía que era fundamental que los niños pudieran disfrutar de ese espacio al aire libre, especialmente aquellos de entre 3 y 7 años, que eran los que más tiempo pasaban en el centro. Estaba convencida de que ese entorno natural les aportaría beneficios a nivel físico, cognitivo y emocional, sobre todo porque ya existían algunos momentos en sus rutinas que podrían adaptarse al cambio, como las horas de juego libre, televisión o manualidades.

Al principio, la información sobre metodologías de educación al aire libre era algo limitada, pero me apoyé en fuentes como la Asociación Edna, Bosquescuela y algunos artículos científicos, además de charlas de pedagogas como Katia Hueso y Heike Freire, que me ayudaron a dar forma a mi proyecto.

Recuerdo que mi tutora de proyecto, una maestra excepcional a la que más adelante en otra entrada mencionaré por su enfoque innovador y técnicas educativas que quiero compartir en este blog, me sugirió que reflexionara sobre la viabilidad de elegir esta metodología, ya que tendría que fundamentarla sólidamente para evitar caer en un discurso idealizado o "utópico". Le respondí que estaba dispuesta a dedicarle todo el tiempo y esfuerzo necesario, porque estaba convencida de que era la propuesta que mejor respondería a las necesidades que había detectado durante mis meses de prácticas.

Aprovechaba todas mis visitas a la escuela para observar el conocimiento que los niños tenían sobre la naturaleza, y me sorprendía ver cómo muchos de los mayores no sabían identificar insectos o plantas, a pesar de vivir en un pueblo rodeado de bosques, ríos y parques. Esto me hizo reflexionar aún más sobre la importancia de conectar a los niños con el entorno natural, sobre todo en una comunidad tan rica como la nuestra, Galicia.

Recopilé toda la información posible sobre la metodología Bosquescuela y diseñé actividades tanto dentro como fuera del aula, adaptadas a los diferentes grupos de edad, desde los más pequeños (0-3 años) hasta los mayores. Como ya he mencionado, integré elementos de metodologías como Reggio Emilia y Montessori, ya que no son excluyentes, incorporarlas y adaptarlas al contexto de la escuela me parecía esencial para ofrecer una experiencia educativa completa.

Tras semanas de investigación, trabajo y mucho cariño, presenté mi proyecto. Aunque obtuve un 10, lo que más me satisfizo de ese trabajo no fue la nota, sino mi autoconocimiento, mi vocación educativa y el llegar a la decisión de estudiar Pedagogía.

Este proyecto no solo marcó el inicio de mi camino en Pedagogía, sino que reforzó mi creencia de que los niños merecen una educación que los conecte de manera profunda con el mundo que los rodea, que los prepare para enfrentar los retos del futuro con curiosidad, autonomía y empatía.

Referencias

• Clouder, C. (2008). Educating the whole child: Waldorf education and the growing child. Steiner Press.
• Early Impact Learning. (2023). 14 Benefits Of Forest School. Recuperado de earlyimpactlearning.com
• Edwards, C. P. (2012). The Hundred Languages of Children: The Reggio Emilia Approach to Early Childhood Education. Praeger.
• Forest School Association. (2023). Forest School principles and values. Recuperado de forestschoolassociation.org.
• Lillard, A. S. (2013). Montessori: The Science Behind the Genius. Oxford University Press.
• MacEachren, M. (2013). Play in natural outdoor spaces as a context for learning and language development. He Kupu.
• Moore, R. (2014). Developing social competence through nature-based education. Child Development Research.
• Nicol, J., & Taplin, J. (2017). Understanding the Steiner Waldorf Approach: Early Years Education in Practice. Routledge.
• Roberts, A. (2017). Forest schools and mental wellbeing (Tesis doctoral). Canterbury Christ Church University.
• Strong-Wilson, T., & Ellis, J. (2007). Children and Place: Reggio Emilia's Environment as Third Teacher. Theory Into Practice, 46(1), 40-47.
• Wellcome Open Research. (2022). How nature benefits children’s learning and health. Recuperado de wellcomeopenresearch.org